noviembre 22, 2008

Los caminos de la vidaaaaaa

Es extraño como las personas más diferentes en algún momento de la vida, se cruzan y comienzan amistades que en épocas pasadas nunca hubiera sucedido. En 1990 vivían una neo-hippie cecehachera, fumadora de mota, amante de Rockdrigo que soñaba con cambiar el mundo; un disléxico panbolero, que vivía en una veterinaria en Ciudad del Carmen y robaba pantaletas; y una fresita sobreprotegida que estudiaba en escuela de monjas y pensaba que estaría casada a los 23. Años después los caminos de esos tres adolescentes tan diferentes los llevó a ser tres adultos que trabajaron juntos y acabaron compartiendo departamento y formando una amistad de esas que están basadas en cariño más que en cualquier otra cosa, una hermandad de esas que pueden durar para siempre.

Hoy me hace muy feliz saber que esa fresita sobreprotegida logró crecer y encontrarse a la cecehachera soñadora y al chico panbolero de la selva, porque ¡¡¡hacen mis días mucho mejores!!!

1 comentario:

Mente tirada dijo...

Sigo esperando gente que mejore mis dias...