cita del diablo

bienvenida la drama queen con sus historias de sexo frustrado –que todos tenemos– y entra al mundo blog con una gran cita
coitus interruptus: "Padre nuestro que estás en mi cama, santificado sea tu miembro, hágase mi voluntad, en la recámara como en las sabanas… y déjame caer en la tentación... ( Diablo Guardian / Xavier Velazco )"

¿quién me ha robado hallo-ween?

Ya se acerca mi antes festividad favorita, ¡Halloween! Y hoy en lugar de llenarme de emoción por buscar un disfraz y una fiesta donde lucirlo, me hace palpitar el corazón de miedo. Se me murió la ilusión, bueno, me la mataron para ser más exacta, el año pasado por estas fechas estaba como loca buscando el disfraz más maravilloso. Siempre he sostenido que no hay disfraz más terrorífico que una mujer de treinta en un vestido de novia, así que me di a la tarea de comprarme uno para usarlo esa noche, lleve a mi mamá a la Lagunilla para que me acompañara a probarmelo, con su velo y azares y todo el kit de boda –eso sí, sin cola, por falta de presupuesto. En fin, lo hice, me puse el vestido, blanco con perlitas (Uuuuuuy!!!), dos crinolinas, el velo con tiara de princesa (¡Claro!), maquillaje recatado, un ramo hermoso (Natural, por supuesto) y el moñote para el carro (pobre Chevy, se veía tan guapo). No es por nada, pero ERA UNA NOVIA HERMOSAAAAA!!!
¿Quién me iba a decir que esa sería la señal para el infierno que se desataría un mes después? Esa fue la última vez que la gente que "me quería" estaría conmigo, después todos, sin excepción, me jodieron la vida.
Y lo que me dule hoy, entre los dolores crónicos, es que me robaron la sonrisa que antes me traía Halloween, que por su culpa esta fecha sea un momento sombría que me aterra, que me llena el corazón y la cabeza de recuerdos, que me hace revivir dolores que no han sanado, que me recuerda lo nefasta que es la gente y lo dolorosa que es la traición. Ahora no quiero disfrazarme, no quiero tallar calabazas, no quiero ni siquiera recordar que existe, y menos aún recordar que anuncia la llegada de mi cumpleaños. Ese día en el que me acabaron de destruir, esa semana en que se unieron en adolescente "complot" para joderme la vida. Esas llamadas –que me costaro miles de pesos en romming– prefabricadas con mentiras y silencios, con descepciones.
Extraño el sentimiento del Halloween, no a las personas, esas no valen la pena y lo han demostrado, grande.

Me quedo con el recuerdo de "La novia maldita" que me hizo tan feliz ese último Halloween:

mi libretita

llevo días recordando esa libretita de papel kraft con forro de tela de florecitas que solía cargar conmigo a todas partes. En ella escribía cuanta cosa pasaba por mi cabeza y cuanta frase me topaba que me pareciera inspiracional, escribía hasta estupideces con mis amigas, cadáveres exquisitos, pero sobre todo todo aquello que me dolía. Y ahora que lo pienso, antes no me dolían tantas cosas como hoy, antes mis problemas eran tan sencillos que hoy me río. Extraño que hoy que mi vida sigue curandose del desgarre más fuerte que he tenido hasta ahora, no escriba nada. Hoy no tengo esa libreta conmigo, ni ninguna otra.
Esa libretita se llenó, en sus últimas páginas puede leerse cómo lo conocí y me enamoré de él. Es más, es curioso que la última página tenga escrita la fecha en que nos besamos por primera vez y la "amenaza" de lo que hasta hoy me envuelve "La obsesión insana de tus besos", así la llamé. De eso han pasado casi 5 años y aún no logro retomar la libreta, no logro escribir.
A veces me desahogo en este blog que lo suaviza todo y otras muy pocas escribo en mi libreta amarilla tamaño esquela del Guggenheim de Bilbao, pero sobre el desgarre no he logrado escribir una sola palabra, tal vez por eso no pueda superarlo... tal vez por eso aún tengo pesadillas terribles en las que revivo el mismo dolor casi idéntico y despierto en medio de un llanto incontenible, tal vez por eso lleve meses soñando con conversaciones sin sentido con mi hermana como las solía tener, tal vez por eso a veces lo mire a los ojos y aún sienta rencor, tal vez por eso no logro avanzar, tal vez por eso me sienta atrapada y con una intermitente necesidad de salir corriendo, de romper con todo y empezar de cero, tal vez por eso a veces sueñe con perder el pasado y dejarlo en él, tal vez por eso a veces mi sueño sólo sea poder irnos juntos lejos donde no tengamos contacto con nadie que me duela, tal vez por eso mi vida se sienta tan confusa y tan triste, tal vez por eso no sepa qué hacer ni como acbar de matar ese dolor de una vez por todas...
Tal vez sólo deba buscarme una libreta nueva que pueda llevar conmigo a todas partes y escribir en ella cuanta cosa pase por mi cabeza y cuanta frase me tope que me parezca inspiracional, escribir estupideces con mis amigas, cadáveres exquisitos, mis sueños y pesadillas, lo que me hace reír, pensar, pero sobre todo todo aquello que me duele...

Confesión #73

Hoy me he dado cuenta que he alcanzado la suficiente madurez para comer jaiba y usar un paraguas... Vida adulta, no más

Sobredosis

El evento de la semana, el gran fotógrafo revelación y amigo Fernando Montiel Klint nos tomó una foto... Una que, al parecer sin querer, refleja el estado en el que vivimos.