junio 10, 2008

¿el dinero peor gastado de mi vida?

$1300 (que debo a mi tarjeta de crédito) y más de 15 horas de mi vida perdidas en ir a un paraje soñado cerca de Tepoztlán para ver a esa banda que me pone el corazón tan calientito que lo derrite, todo para que a la mera hora Sigur Rós sólo tocara 6 rolas!!! porque el pinche Orri –el baterista– se enfermó en la segunda rola y despareció del escenario junto con el resto de la banda por más de media hora. Todo para que regersaran sin él a tocar 4 canciones más y nos dejaran a todos los que pagamos con ganas de más.

Hasta este punto pensaba que igual había valido la pena porque el lugar era maravilloso y la banda sonaba increíble (aunque sólo fueran 6 rolas), hasta que llegué a la salida y tuve que caminar 20 minutos en formación pingüino rodeada de 6200 cabrones más. Luego llegar a la carretera a buscar durante HORA Y MEDIA un camión que me trajera al DF entre hordas de gente confundida subiendo y bajando, golpeando en las ventanas de los camiones cual zombies hambrientos. Para al fin lograr encontrar uno y hacer más de 2 horas de camino en un tráfico infernal rodeados de zombies perdidos que intentaban subirse.

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